La tecnología en la Justicia avanza a un ritmo acelerado, influenciando de forma irreversible la prestación del servicio jurídico en todos sus sectores. Es una ayuda significativa a los sectores que disponen de muchos datos para ser analizados, como el ecosistema de la justicia.
El Poder Judicial brasileño pasa, actualmente, por cambios significativos y necesarios en su sistema, buscando desburocratizar los procesos, así como facilitar el trabajo de los funcionarios de los órganos de la justicia y prioritariamente de aquellos que dependen de agilidad en los procesos.
La sociedad desea un servicio más efectivo y transparente, siendo que la presión por más resultados y menores costos colocó al CNJ – Consejo Nacional de Justicia como protagonista de esta transformación. Los principales órganos de la justicia están invirtiendo en alternativas y políticas públicas inteligentes para aumentar la eficiencia operacional del sistema judicial como un todo y para presentar buenas prácticas.
En este contexto, la tecnología se presenta como estrategia eficaz y complementaria de desarrollo del Poder Judicial, permitiendo la optimización del trabajo. Esto significa aumentar la velocidad de la información, más seguridad de los datos y disminuir el uso del papel y todas las consecuencias de esta práctica. Así, identificamos algunas ventajas traídas por el uso de la tecnología en el ecosistema judicial.
La tecnología, principalmente la relacionada con la Tecnología de la Información (TI), constituye la solución más viable para que el Poder Judicial se vuelva más ágil. Esto es porque sólo la transformación digital puede hacer el cotidiano jurídico cambiar, además de promover el ahorro de recursos ambientales y financieros.