Construir un Poder Judicial eficiente y consolidar la optimización de procesos judiciales es un gran objetivo en el ámbito de la Justicia.
Orientar esfuerzos hacia la productividad y la eficiencia puede ayudar a construir este escenario favorable, que mejorará los procesos de atención a la ciudadanía, al igual que la experiencia de Magistrados, juristas expertos y otros actores claves del entorno.
Considerando esta realidad, en las siguientes líneas de este post profundizaremos en el impacto de la productividad y eficiencia en el Poder Judicial.
Beneficios de la productividad y eficiencia en la Justicia
Entre los principales beneficios asociados a la productividad y eficiencia en el Poder Judicial destacan los siguientes:
I. Agilidad en los trámites
Cuando existe eficiencia interna y productividad de todas las partes involucradas, esto se refleja en una mayor rapidez en los trámites que se ejecutan en el entorno del Poder Judicial.
Independientemente del tipo de proceso jurídico, un escenario favorable promoverá que el tiempo de resolución sea menor, pero a la vez manteniendo los principios de transparencia e investigación que son necesarios para una correcta aplicación de la Justicia.
II. Disminución de reprocesos
La eficiencia también va relacionada con una mayor tasa de efectividad en cada decisión o acción emprendida.
Por ese motivo, si hay eficiencia en el Poder Judicial, la incidencia de reprocesos y duplicidades disminuirá de manera importante.
Esto a la vez se traduce en optimización de recursos, especialmente económicos, ya que los reprocesos siempre representarán un gasto adicional o no planificado para las instancias del Poder Judicial.
III. Experiencia positiva para usuarios
La ciudadanía es la principal beneficiada de la productividad y la eficiencia en el Poder Judicial.
Y esto no solo es consecuencia de la mayor agilidad que tendrán los trámites al aplicar estos principios.
En la Justicia, la eficiencia también es sinónimo de transparencia y respeto a los derechos de la ciudadanía. Por ello, si se toma en cuenta, existirá un escenario de mayor equidad y seguridad jurídica.
IV. Experiencia positiva para miembros internos
Así como la ciudadanía, Magistrados y otros miembros del Poder Judicial se ven beneficiados, en términos de experiencia, una vez se aplican los principios de productividad y eficiencia.
Una operación interna mucho más estable, ágil y sencilla, con ayuda de tecnologías y otros recursos que agregan valor, se traduce en una mejor experiencia.
Cómo promover estos valores en la Justicia
Para consolidar la productividad y eficiencia en el Poder Judicial, conviene tomar en cuenta los siguientes elementos clave:
I. Rigurosa organización interna
El orden interno es fundamental para que se alcance el máximo potencia de eficiencia en una organización, y las instituciones de Justicia no son la excepción.
Esto involucra definir con claridad los responsables de cada tarea, identificar las prioridades y facilitar el acceso a información relevante, entre otros aspectos.
II. Capacitación continua
Mientras más ágiles y acertados sean los funcionarios – e incluso empleados públicos administrativos – en cada una de sus funciones, mayor será la eficiencia y productividad en el Poder Judicial.
Es por ello que la capacitación continua es una estrategia de gran valor, que debe formar parte de las prioridades de los líderes y máximos responsables.
III. Digitalización
Al igual que en las empresas tradicionales, las diferentes instituciones del Poder Judicial pueden verse muy beneficiadas del proceso de transformación digital que experimenta el mundo en la actualidad.
Gracias a la digitalización, se reduce de manera drástica actividades manuales y por lo tanto el uso del tiempo es mucho más eficiente.
Al liberarse de responsabilidades, las personas implicadas en los procesos pueden dedicar más tiempo y atención a la planeación, la mejora continua y otros elementos que agregan valor.
Uno de los procesos que más beneficiados se ve es la gestión documental, al centralizar todos los archivos a un plano digital mucho más sencillo y ágil para administrar.
IV. Tecnología avanzada
Invertir en tecnología es un elemento clave para optimizar el Poder Judicial y hacer valer los principios de productividad y eficiencia.
Soluciones como un sistema de control y gestión judicial, con enfoque en la automatización, pueden ayudarle a agilizar sus procesos y sacar el máximo provecho posible de los recursos, incluyendo el tiempo.
Es importante que las instituciones de Justicia siguen de cerca estas tecnologías e implementen aquellas que se adaptan de manera directa a sus necesidades particulares.
¿Cómo puede ayudarle el SAJ?
El SAJ es un software de automatización judicial que se alinea, de manera directa, con los principios de productividad y eficiencia que debe perseguir toda institución de Justicia.
Por medio de esta solución podrá avanzar en su proceso de transformación digital, centralizando la información y las tareas críticas para su operación cotidiana y la prestación del servicio público.
Para comprender cómo funciona esta herramienta y sus grandes alcances para prevenir la sobrecarga procesal, lo invitamos a que también lea el siguiente post de nuestro blog:
¿Cómo el software de automatización Judicial ayuda a prevenir la sobrecarga procesal?