Cuando se trata de ciberseguridad y privacidad en línea, una de las mayores preocupaciones de los usuarios es la trazabilidad de su actividad en internet: el rastreo de la huella digital en todas las etapas de la operación electrónica.
Es importante no confundir huella digital con huella dactilar. Si bien en algunos países ambos términos son usados como sinónimos, el segundo concepto hace referencia principalmente a la impresión que pueden dejar las yemas de los dedos.
Otra expresión que debe diferenciarse de las anteriores es huella dactilar electrónica, la cual alude a la imagen digital de la huella dactilar utilizada para la identificación biométrica del individuo, a través de sensores y sistemas de autenticación.
Pero entonces, ¿qué es la huella digital y por qué es relevante para usuarios, instituciones de Justicia y organizaciones jurídicas? A continuación, le presentaremos las implicaciones de este concepto en la era de la digitalización.
¿Qué es la huella digital?
La huella digital es el rastro generado por el usuario durante su actividad en línea, el cual incluye información como búsquedas, páginas visitadas, contenido publicado, interacciones en redes sociales e historial de compras.
Otros datos que pueden formar parte de la huella digital son: la dirección IP (Internet Protocole) del dispositivo usado para la conexión; el tipo de navegador; la ubicación geográfica del equipo; el idioma; y el sistema operativo.
En ocasiones, también contiene información personal como datos de inicio de sesión; nombre; dirección de correo electrónico; número telefónico; historial de navegación; perfiles en redes sociales; fotos; subscripciones a blogs y comentarios en foros.
Los informes obtenidos a partir de la huella digital del usuario son utilizados para mostrar anuncios personalizados, filtrar los resultados de búsqueda en navegadores e incluso detectar fraudes en línea.
En el área del marketing, la huella digital es empleada para enviar publicidad dirigida, realizar estudios de mercado sobre los intereses y hábitos de compra del público objetivo, y definir el perfil del cliente ideal (buyer persona).
Tipos de huella digital
Es posible identificar dos tipos de huella digital:
- Huella digital activa.
- Huella digital pasiva.
El primer tipo de registro alude a la información que es compartida por el usuario de manera consciente.
Un ejemplo de huella digital activa es cuando la persona rellena un formulario en línea, ingresa sus datos en un website para obtener productos descargables o acepta las cookies de una página web.
Por otra parte, la huella digital pasiva hace referencia a la captación de información sin que el usuario tenga conocimiento de ello. En esta categoría, figuran las interacciones en redes sociales y las cookies cuando son aceptadas sin entender su función.
¿Cómo es recolectada la información de la huella digital?
Las cookies son pequeños archivos creados por la página web para almacenar datos en el navegador o el dispositivo utilizado (computador, tablet, smartphone), cuando la persona ingresa a un website.
La solicitud de consentimiento para el uso de cookies propias y de terceros en una página web suele presentarse al usuario al visitar una página, justo antes de comenzar el proceso de navegación o acceso a la información.
Generalmente, la notificación de cookies está acompañada de una pequeña reseña de las funcionales del archivo, siendo las más comunes permitir el acceso a las funcionalidades del sitio, extraer estadísticas y mejorar la experiencia de los visitantes.
Sin embargo, como mencionamos previamente, las cookies también pueden recolectar otra información como preferencias de idioma y ubicación, pero solo tendrá acceso a datos de identificación más personales si el usuario accede a proporcionarlos.
Tipos de cookies
Al igual que sucede con la huella digital, existen diferentes tipos de cookies, entre las cuales destacan:
- Cookies de sesión: son eliminadas cuando es cerrado el navegador.
- Cookies persistentes: permanecen almacenadas por tiempo determinado, aun después de finalizar sesión.
- Cookies seguras: usa solo conexiones HTTPS y almacena datos en formato cifrado.
- Cookies de personalización: recuerdan las preferencias del usuario.
- Cookies de análisis: recopilan información sobre hábitos de navegación y consumo.
- Cookies técnicas: cumple tareas básicas indispensables para el correcto funcionamiento de una web, como la identificación de usuarios registrados.
Importancia de la huella digital
Todas las personas pueden generar huella digital, su importancia radica en el potencial de ser utilizada como medio de verificación de identidad en línea, impactando la reputación y la seguridad de las personas.
En el campo de las investigaciones criminalísticas, la huella digital es relevante para la obtención de pruebas como horarios de acceso a determinada información, historial de búsqueda y ubicación geográfica de dispositivos electrónicos.
No obstante, los funcionarios de órganos de Justicia que realizan búsquedas en servidores no protegidos corren el riesgo de dejar un rastro electrónico, capaz de ser detectado por sujetos maliciosos (hackers).
Asimismo, el almacenamiento de casos en bases de datos y la emisión de documentos vinculados a procedimientos legales son acciones susceptibles de dejar huella digital, si no se cuenta con software de gestión Judicial, como SAJ de Softplan.
La modernización del ecosistema del Poder Judicial o Justicia Digital es un proceso que debe ser encarado considerando el valor de la información sensible resguardada por los órganos encargados de la procura y la impartición de la Justicia.
Existen leyes en México orientadas específicamente a la protección de este tipo de información, como lo son la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares (2010) y la Ley General de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados (2017).
Adicionalmente, en el párrafo 2 del artículo 16 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la protección de datos personales está consagrada como un derecho y se reconoce la potestad de oponerse a su uso.
Por ello, los órganos de Justicia en México deben otorgar prioridad a la confidencialidad de la información y la gestión de la huella digital, durante la adecuación de los sistemas informáticos internos.
¿Cómo conocer huella digital?
Existen diferentes métodos para conocer su huella digital, la forma más simple consiste en realizar una investigación de los resultados arrojados por los motores de búsqueda, al introducir el nombre de una persona, institución o empresa.
Otra alternativa es usar herramientas de escucha social, es decir, plataformas o programas que rastrean las redes sociales para detectar menciones y conversaciones relacionadas con el nombre sugerido.
Esta técnica es frecuentemente usada en el área de marketing para monitorizar la relación de las marcas o empresas con el público objetivo, contando para ello con herramientas populares como Hootsuite y Sproud Social.
Desde luego hay agencias de seguridad y aplicaciones de paga que pueden rastrear con mayor efectividad la huella digital y en ocasiones, eliminar información publicada sin la debida autorización.
A pesar de ello, la prevención juega un papel fundamental en la efectiva gestión de la huella digital, para lo cual es preciso tomar acciones como:
- Eliminar cuentas que no son utilizadas.
- Evitar redes de Wifi públicas.
- Aceptar únicamente las cookies obligatorias.
- Eliminar el historial, el caché y las cookies del navegador con frecuencia.
- Ajustar las configuraciones de privacidad del navegador
- No iniciar sesión con redes sociales.
- Usar una red privada virtual (VPN).
La huella digital es un elemento que forma parte de la interacción en internet y si bien resulta complejo eliminarla en su totalidad, es posible gestionarla con consciencia para evitar la vulneración de datos y otros riesgos de seguridad.
Ahora que conoce más sobre la huella digital: qué es y por qué es relevante, descubra ¿Cómo el software de automatización Judicial ayuda a prevenir la sobrecarga procesal?, en el blog Justicia Digital.